Foto: Panda Security
El arte está en una transformación constante y ahora que el mundo está totalmente inmerso en las nuevas tecnologías, el arte no se ha quedado atrás y se ha dejado atraer por este nuevo espacio.
Si bien Internet y el mundo digital llevan décadas en nuestras vidas, fue hace relativamente poco cuando comenzamos a escuchar sobre las criptomonedas. Desde entonces, se ha creado un nuevo mundo donde el arte ha encontrado también su lugar mediante el criptoarte.
¿Qué es el criptoarte?
Como expone El economista, el criptoarte ¨se trata de una nueva vertiente creativa que se centra en la producción de arte digital, pero asegurando su autenticidad bajo la tecnología blockchain, una cadena de bloques cifrados y descentralizados que no dependen del control de un tercero sino del manejo de los propios usuarios. El caso más paradigmático es el de las criptomonedas, cuyo fin es económico. Sin embargo, en el mundo del criptoarte se utiliza este sistema para la adquisición de una autoría entre dos personas: la A y la B.¨
¿Cómo funciona?
Todo comienza cuando un o una artista transforma su trabajo en criptoarte, es decir, cuando lleva su arte al mundo virtual. De esta forma, esa creación queda protegida y encriptada y así se garantiza tanto su autenticidad como la autoría. Posteriormente, cuando alguien compra ese arte está comprando un arte no material. En este sentido, Panda Security indica que ¨el criptoarte es una manera de lograr que las obras artísticas creadas en soportes digitales sean únicas y, por tanto, más valiosas a los ojos de los compradores. Normalmente las obras digitales son particularmente fáciles de reproducir, debido a su naturaleza desmaterializada, pero una nueva tendencia está extendiéndose en la que cada obra puede vincularse con un token no fungible (TNF). Estos TNF poseen un número de identificación único asignado a cada obra, cifra que se coteja con una base de datos distribuida, actualizada y compartida por una red de ordenadores, la blockchain.¨ Como explica El País, ¨los TNF, creados en 2017 por la red blockchain Ethereum, son las escrituras de Internet. Un certificado de propiedad y autenticidad sustentado en tecnología blockchain que distingue un archivo digital original. Y aunque pueda ser descargado mil veces, solo hay un dueño y un original, los que acredita el TNF.¨
Esta nueva forma de hacer y compartir arte posee varias ventajas:
● No puede ser falsificado, gracias a la blockchain ● Son piezas únicas ● Puede ser transferido de manera rápida ● Se puede exhibir en varios mercados y exposiciones simultáneamente
De esta manera, el arte vuelve a transformarse para regalarnos nuevas formas para disfrutar de él.
Fuentes:
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